Es bien sabido que el suelo pélvico es una zona que con el paso del tiempo, embarazos y deportes de alto rendimiento reduce su fuerza y sensibilidad y es por eso que es sano realizar este tipo de ejercicios para mantenerlo firme. Muchas veces es olvidado sin pensar que aquí existen un conjunto de músculos y ligamentos que permiten que órganos como la vejiga, útero, vagina y el recto se puedan sostener adecuadamente.
Algunos de los beneficios de realizar esta práctica son: ayudar al control de esfínteres, recuperar el tono muscular de la pelvis, experimentar mayor placer durante la intimidad, mejorar el parto, etc.
Los ejercicios consisten en 4 series para incorporar en tu rutina diaria:
Lento
Este ejercicio se repite 10 veces y consiste en contraer 5 segundos los músculos del suelo pélvico, luego respira de manera suave y relaja los músculos por unos 5 segundos.
Rápido
Consiste en contraer y relajar los músculos durante 2 o 3 segundos de la forma más rápida posible. Se debe realizar de manera progresiva comenzando con 10 repeticiones diarias hasta llegar a 50.
La onda
Se deben contraer los músculos que se encuentran alrededor de la uretra, posteriormente los que se encuentran en la zona anal, relajando de atrás hacia adelante.
El ascensor
Se contraen los músculos lentamente imaginando que es un ascensor que sube lentamente y en cada piso se detiene lentamente.