Es bien sabido que en la adolescencia muchas cosas pasan con un joven, tanto físicas y emocionales, ya no es aquel niño que te obedecía sin dudar, pero tampoco es un adulto para valerse él/ella mismo (a), por lo que sigue necesitando de ti. Como se procura su bienestar y seguridad, se les imponen reglas y se les dan ordenes, a las cuales, ellos terminan por desobedecer, ya que tienen ese deseo de libertad que sus padres y sus reglas “le impiden”, y como consecuencia, ellos protestan y se ponen rebeldes.
Es por eso que aquí te traemos 10 consejos para lidiar con este aspecto difícil de la juventud de tus hijos:
1. Escúchalo: Trata de entenderlo y saber lo que es importante para él/ella. Hazle saber que lo escuchas, que valoras su opinión y que no solo le impones las tuyas.
2. Establezcan, entre todos, las normas del hogar: Si se hace así, dándole varias opciones, lo tomará como un acuerdo y no como una imposición.
3. Hazle cumplir las normas acordadas: Es importante que sepan que no es un juego, que es lo que se espera de ellos y que tengan disciplina.
4. Habla con ellos sobre moral y valores: Así les ayudarás a diferenciar lo bueno de lo malo, aprenderán a manejar su conducta y ajustará su actuar en diferentes circunstancias.
5. Fomenta el respeto: Para esto, no hay mejor ejemplo que sus padres. No puedes pedirles respeto y no respetar sus cosas y/o privacidad. Tampoco toleres ninguna falta de respeto, ni hacía ti, ni hacía nadie.
6. Dale privacidad: No intentes acaparar todo su tiempo y espacio. Recuerda que se están haciendo adultos y necesitan su intimidad.
7. Fomenta su independencia y responsabilidad: Déjalo hacer cosas por sí solo. Puedes vigilarlo, pero deja que él mismo asuma sus responsabilidades.
8. Ante un arrebato de ira, mantén la calma y no pelees: Espera a que se tranquilice e intenta razonar con él/ella en ese mismo momento.
9. No lo critiques: Lo tomará como un ataque. Haz el conocido “Sándwich de cumplidos” recordándole sus virtudes y mejores cualidades y poniendo al final aquel defecto que quieres que corrija, por ejemplo: “Hija, yo sé que eres muy inteligente y creativa, eres una artista, pero es necesario que corrijas esas calificaciones si quieres tu Iphone”.
10. Establece un ambiente de confianza y comunicación: Hazlo sentir seguro contigo para que te cuente sus problemas, dudas, inquietudes, etc.
Siguiendo estos tips, la comunicación con tu hijo (a) mejorará notablemente y sus vidas darán un gran cambio a beneficio de los dos.